El Fin De Los Mundos. Capítulo 5 - La Muerte.

<< Soldado Jay Jackson >>

Primera noche de servicio aéreo, el maldito trasto vuela y tartamudea, patea como una mula y eso te pone bastante nervioso. Es la primera nave voladora de la historia, ¿Como puedes confiar en algo que solo ha sido probado 5 veces y la ultima vez casi se estrella? Me puse el casco desde antes de que subieramos, porque tiene un tanque de oxígeno conectado.
El oxígeno te pone bastante drogado, naturalmente claro. El paramédico (El único que al parecer tiene experiencia aquí trabajando con el capitán) dijo que al parecer cuando caes a 2 kilómetros de altura y saltas al vacío, por ley de la lógica tu corazón se acelera y tu respiracion tambien, entras en pánico y no sabes que hacer porque el oxígeno no llega al cerebro como normalmente debería.

A comparacion de el, la altura es lo último que debe de preocuparte.
Puedo sentir su fría mirada a través de esos goggles rojos de un aviador.
Todos le vemos, pero nadie se atreve a hablarle directamente, esta sentado ahi, con la frente en alto y esos goggles rojos por encima de aquel casco, apuesto a que nos ve, y puedo sentir su maldita mirada.

Todos en esta nave hablan de él. Dicen cosas, rumores. Solo yo siento su mirada.

Le llaman "K" a secas, nadie sabe su nombre, solo su superior. Otros le llaman "Killer" (Asesino) así que eso es el doble de acojonante. Su traje es un traje normal, como otros soldados, pero totalmente negro para el camuflaje y lleno de cargadores por doquier, dicen que ese traje tiene 4 cuchillos ocultos, en caso de no tener acceso a las armas de fuego: 2 en cada muñeca, uno en la pierna derecha y uno en la cintura en la espalda. Su casco es grande, sus goggles rojos están por encima del casco, supongo que es parte de la intimidación. Es grande y fuerte, solo lleva tres armas, una MP5 con silenciador, una .45 con silenciador (Igual que su hermano) y una revolver.
La asesina de dioses.
Mortis en persona forjó esa arma, mata cualquier cosa y no produce herida que no sea mortal. Le pertenecía a su padre.

Su padre, otra historia acojonante. Robert Oldfield era un bastardo, todos le odian aun en la actualidad, y lleva más tiempo muerto del que yo tengo con vida. Robert era un agente de la Organización, no era el mediocre, pero tampoco era el guapo con grandeza, solo otro agente más.
Por vicisitudes del destino, un dia se convirtio en un mago terrorista, su poder mágico se debía a que la gente le tenía miedo. Infundía el miedo, eso significaba quemar ciudades enteras, matar familiares enfrente de los niños y luego obligarlos a comerselos... dios, una época de terror.
Dicen que su padre mató a su madre delante de sus narices para luego intentar matar a su hermano. Otros dicen que Mortis es su madre, por eso lleva la muerte con el. Lo que es seguro es que el apuñaló a su padre, agarró a su hermano y se fue de la casa a la ciudad, a su hermano le llaman "El hijo de puta" porque K pagaba a las prostitutas para que le amamantaran. Dicen que K era de los chicos malos y que es así como el podia sobrevivir y alimentar con el pequeño René.

Dicen un montón de cosas sobre él, y solo el sabra cuales sean ciertas.

- Son unos imbeciles. -Dice, y su voz se siente ronca y falta de emoción.
- ¿Como nos llamó? -Pregunta uno de los chicos.
- Imbeciles.
- No permitiré que nos llame así...
- Son unas perras chismosas hablando chismes de mi que escucharon en un bar con un par de amigos ebrios, -Se pone en pie- y creen que por eso me conocen. Mi madre se llamaba Naomi Pierce y fue la mejor madre del mundo, y soporto a la mierda de persona de mi padre por muchos años. El arma si perteneció a mi padre y si fue forjado por ella. Las putas de la Red Store alimentaron a mi hermano. Y trabaje para un tipo cuyo trasero voló en mil pedazos un día porque hacía apuestas ilegales. Pero ustedes son una bola de novatos acojonados porque me consideran el mas grande cabron de la faz de la tierra, no se acojonen aún, porque enfrentaremos a tipos peores ahí abajo.
- No tienes porque insultarlos, K. -Dice el paramédico- Existe el respeto profesional.
- Parece que los sacaste de la cosecha. -Cuchichea, y luego existe un silencio perturbador- Oh por dios, en serio los sacaste de la cosecha.
- ¿Eso es malo, señor? -Pregunto.
- A)No me llames señor, y B)Apuesto a que nada mas te enseñaron a disparar, pero ahí abajo te meteran un montón de balas en el culo si no sabes qué hacer.

Todos le miran, y por un momento todos se sienten comprensiblemente raros, nos ha dicho varias cosas que son ciertas. La Cosecha tiene una mala reputación, si eres un chico muy entusiasta  te diriges ahí por propia voluntad y dices "A la mierda, quiero ser como K"; o , en el peor de los casos, puedes quedar pobre y decir "Que la Organización me mantenga" y todos quieren ser analistas, nadie un agente de campo. Y los pocos que los hay, todos quieren ser como el tipo que nos está mirando a través de los goggles rojos con una mirada fría.

- Okey, nenazas -Empieza su cátedra- les explicare las reglas. Mision de infiltracion, significa que no matan a nadie excepto que yo lo diga y cuando yo lo diga o la misión se va a la mierda. El objetivo es conocer más acerca del rey del hampa en estos lugares, no tenemos una mierda de información y necesitamos por lo menos 6 hombres desarmados con vida para interrogar. Estamos de 5 hombres a uno, si son muy imbeciles eso significa que hay 5 veces más que nosotros. Sus armas, rifles de carga eléctrica, son una mierda comparada con las armas que ellos tienen. Ellos tienen rifles que harán agujeros tan grandes como una manzana y un lanzagranadas que no dejara ni un pedazo de carne que no reconoceremos. Debido a que todos ustedes, bola de idiotas, fueron sacados de la Cosecha, es obvio que morirán apenas llegar a la tierra, y solo 2 o 3 de ustedes sobrevivirán; eso sin contarme a mí y al paramédico. Si Aquila existe que ella les ayude, porque yo no lo haré.

Cada quien toma su arma, y se pone el casco, acciona el botón de oxígeno y aseguran su paracaídas. El primer salto Halo de la historia, el primer despliegue aéreo de soldados. Por un minuto vemos la luz de la luna bañarnos, y se ve tan bella. Vemos como el tipo de traje negro y goggles rojos da un pequeño brinco, y nosotros le seguimos.

Ahora son nuestras miradas drogadas puestas sobre él; y el ya es un miedo de segundo plano, ahora nuestra preocupación es la caída.

El Fin De Los Mundos. Capítulo 4 - El Magus.

Rodeado de agua hasta las rodillas, nervioso, cansado, golpeado...
Sensaciones corpóreas nada más, la voluntad del Magus seguía viva, aunque su esperanza se caía a pedazos en cada minuto que pasaba en aquel sucio y apestoso (Literal) drenaje. ¿Como podemos darnos esperanza a nosotros mismo si aquello por lo que peleamos ya está fracasado?
Seguía reflexionando, algo de la escuela debió haberle quedado grabado en la cabeza a lo largo de su vida, algo que le daba una picazón cerebral y que el sabia que persistirá hasta que pudiese recordarlo.

Ruidos extraños. No son ratas, o son ratas gigantes, demasiado ruido, cuando uno se mueve con el agua hasta las rodillas es obvio que el agua hará un sonido como de chapoteo.
El magus se pone de rodillas, tratado de que solo su nariz y sus ojos están afuera del agua, pues si son matones no podrá aguantar la respiración por siempre.
Respiración.
Oxígeno.

- ¿Qué nos había pedido el jefe? -Pregunta uno de ellos- ¿Una piedra?
- Una gema, gran ignorante. -Responde el otro. - El chico debe de tenerla.
- Solo le falta una al jefe.
- De los ninjas negros escuche que una gema estaba quemada; extinta, ellos la eliminaron de la faz de la tierra.
- ¿Crees que sea la gema que el jefe busca?
- Hay un zillón de gemas ahí afuera, y dudo que sea exactamente aquella que el jefe tiene.

Gary se pone en pie, casi se atraganta con el agua cuando escuchó lo de la gema, cuando los matones le ven tan solo se quedan parados, estáticos, y eso demuestra que son debiles de mente hacia aquella magia.
El Magus imagina en su mente aquella bella mujer morir, salvando su vida antes de aquello, y estalla. Literalmente, estalla, las llamas opacan la vista de aquellos matones, en las paredes y techo hay fuego, Gary recuerda aquella muerte y entonces siente como esas llamas se expanden a lo largo de todo el techo y la pared de aquel pasillo lleno de inmundicia y desechos. Si... el agua empieza a evaporarse y los matones empiezan a asfixiarse.

Ley de la química: sin oxigeno no hay agua.

Gary se calma durante un minuto, las llamas se apagan. Ahora el agua no le llega ni a una tercera parte de donde estaba antes. ¿Y si aquella gema realmente era la que el Profesor buscaba? ¿Qué haría cuando se enterase de que está extinta?
Volver por el mismo camino, claro; pues es el único camino disponible a el templo de donde Wind venía. El se enterara cuando llegue.

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Gary salió del drenaje en la primera oportunidad que se le presentó. Era de dia ya, y su hambre le invadía. ¿No había vuelto el Profesor aun? ¿O es que ya se lo perdió?
No había nadie cerca, pocos habitaban aquella isla. Dios, el hambre era bastante fuerte.
Vio un señor caminando, vestido de negro. Obviamente era su enemigo, así que Gary se puso tan derecho como pudo haberse puesto y trato de no mostrarse débil o cansado, en su punto de tranquilidad pudo obtener su forma elemental e ir de vuelta a su forma humana. Realmente no se había dado cuenta de lo desgarrada y sucia que estaba su ropa. Fue directamente hacia su enemigo.

- ¿Quien cojones eres tu? -Dijo el Profesor, aun caminando.
- Soy el hijo de puta mas duro que conocerás. -Respondió el chico.
- Tu... eres el de la piedra.

El profesor se detuvo, y estaba justamente cara a cara con el chico que no había podido matar antes. Su apariencia no era la mejor, y sonrió un poco cínicamente porque se le había ocurrido una ironía para sacar de quicios, no importaba su furia, en dos minutos estaría muerto el pequeño elemental de fuego.

- ¿Estuviste forjando fierro? -Pregunto. Y carcajeo.

El joven le aventó una bola de fuego que el Profesor desaparece en un parpadeo con un poco de agua. ¿Tan tonto seria el chico? ¿Qué intenta? El profesor se desespero, y baño al joven con agua a presión, a las rodillas sobre todo para debilitarlo. El joven cayo violentamente e intento ponerse de pie.

- ¿Estas cansado, chico?
- Nah, solo me estoy preparando... vamos, perdedor... tu y yo... no hemos terminado...
- Ni siquiera hemos empezado.

Ambos se hicieron elementales, esto seria una perdida de tiempo, el chico no sabe lo que hace, seguro solo es un ataque de rabia.
En forma de elemental el fuego empieza a rodear al Profesor... ufff, que calor, nada que el agua no podría solucionar. No, el agua no avanza, no apaga las llamas, se evapora más rápido cada vez. Vuelve a su forma humana antes de quedar evaporado, y recibe golpes sólidos de todos lados, primero en el estómago, rodillas, costilla, cara, patada en las piernas.

Estando de rodillas, ahogándose, ve al joven en forma elemental parado junto a él. El dolor lo invade, y el joven carcajea.

- ¿Cansado, viejo?
- Un poco.
- La gema que buscas fue destruida, los ninjas la destruyeron hace muy buen rato atrás. Pero veo que tu tienes las otras gemas en ese bonito traje, ¿Te hacen sentir poderoso?
- ¿Como... pudiste... derrotarme...?
- No hay agua sin oxígeno.

El joven da el golpe maestro. El corazón del Profesor termina justamente en el suelo, detrás de el, y sus ojos solamente demuestran miedo y ansiedad.
El profesor ha muerto, el Magus le atravesó el pecho con una mano.

Las gemas, están ahí, el joven puede sentirlas, siente su poder. Demasiado poder, difícil de controlar, no vale la pena que tanta gente haya muerto por ellas. Las derrite, y pierde esperanza de saber que es lo que otorgaban. Jamas se sintio mas poderoso. Entonces comprendió.
El poder se otorga de manera equitativa entre elementales, un equilibrio natural. Cada vez que uno moría, el poder se repartía entre los demás.

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-¿Qué pasó después? -Pregunta la joven Nancy.
- Fox In Fire.
- Lo del emblema.
- Volví al templo de Wind, y les enseñe a aquellos que sabían menos que yo. Les di una razón para la cual vivir, eliminar todo rastro de elemental que no sea de nosotros. La Organización se encargó de eliminarlos, uno por uno. Fox In Fire ya no existe, la organización les erradicar y solo quedo yo, el último elemental registrado.
- ¿Qué pasó entonces?
- Me la he pasado buscando elementales durante muchos años...
- Me refiero, con ella.
- Pues, murió...
- Pense que habria pasado algo. ¿Y con el Profesor?
- Creme su cuerpo con todo y gemas, no podría haber pasado mucho con el. A veces sospecho que no murió del todo. Siento... bajones de energía... como si él estuviera aquí.
- Tal vez se evaporó. Tal vez no tiene forma física.

Excelente observación. Eso explicaría un par de años de malestares y explosiones.
La chica sigue hablando mientras sirve tragos, y a él la cabeza le arde, sus ojos arden. Su poder es incontrolable. Cuando abre sus ojos son rojos, su corazón arde y bombea sangre como un caballo a galope. No lo puede evitar.

Entonces todo desaparece y deja una estela. La ciudad se ha reducido a cenizas.
Y que Aquila se ampare de sus almas.