La sonrisa es aterradora cuando la ves. No es broma, ese es su apodo, Joker, y su sonrisa es la demostración de la ironía en su más puro sentido. "El bromista siempre ríe" por así decirlo. Su cara, expresa una molestia pura; esa sonrisa le da el toque irónico. El bromista siempre está de malas; esa es una realidad.
Desde que su hermano se perdió, las cosas habían cambiado. 5 años debieron pasar entre aquel entonces y el ahora. En esos 5 años, su hermano fue un bohemio en un bar, sin memoria de lo que había pasado, y este tipo, Joker, se convirtió en una suerte de reemplazo para su hermano. Y eso le costó a su cara un precio muy alto.
Una sonrisa de Glasgow. Metieron la navaja en su boca y empezaron a cortar de lado a lado, todo bromista debería de tener su sonrisa. Se la hicieron por querer hacerse el gracioso, así que al igual que el mas raro payaso, le dibujaron una sonrisa que le haga sentir cómodo consigo mismo. La sonrisa le dolio, y la sangre cayó de lado a lado de su rostro, formando una sonrisa perfecta que el jamás se cansaría de tener.
Su hermano, no se han visto en años. A duras penas saben de la supervivencia del otro. A "K" se le contaba muerto, pero no lo estaba, estaba siendo un bohemio. A Joker se le contaba reemplazando a su hermano, pero no lo estaba, estaba esperando a que este volviera para volver a ser su sidekick.
Joker es hermano de K. Su nombre es John. Tiene una sonrisa de Glasgow en la cara, asemeja una sonrisa gigante, de ahí el apodo. Su vestimenta es tan sencilla como unos pantalones de camuflaje, medio traje de reacción a impactos, unos sencillos guantes, un arnés azul con cargadores y granadas y en el cinturón una .45 lista para desenfundar como los vaqueros de antaño.
A Joker le gustan los vaqueros, cuando era niño, el joven K lo llevaba a ver las pelis de vaqueros. Desenfunda rápido para sobrevivir. K aún no era K, era otra persona más joven e inexperta, y Joker era John, el pequeño John. Hace 5 años, en la operación del reactor, K y su equipo desaparecieron.
Muchos de ellos murieron, K estuvo fuera por 5 años. Apenas está volviendo, esta es su 1era misión oficial para la Organización desde su regreso, apenas lleva un par de días en el servicio y ya tiene una pila de cadaveres a su alrededor. Literalmente.
La cosa esta asi: los chicos salieron mientras K liquidaba todo lo que respiraba ahí dentro. Así que cuando terminó, había una pila gigante de muertos acomodados uno sobre otro. Cuando los chicos de la Organización entraron, vieron el desastre que se había armado, llamaron a un superior. En este caso, el Joker.
- ¿Dónde está? -Pregunta. Su cara está llena de frustración.
- ¿K? - Pregunta el soldado.
- Si, mi hermano. Killer. ¿Dónde está?
- Adentro -Dice el paramédico- sobre una pila gigante de muertos. El hijo de puta sabe como montar un espectaculo, Johnny.
- Es K de quien hablamos. -Dice Joker y se mete de lleno en el edificio.
Sangre. Orina. Excremento. Tabaco. El olor... es malditamente fuerte. K está sentado sobre la pila de cadaveres gigante.
- Hermano. -Dice K, sin quitar la mirada del cigarrillo- Llegas tarde.
- ¿En verdad eres tu, Michael? -Pregunta Joker, extrañado.
. ¿Quien mas podria ser? Claro que soy yo.
- Estuve... molesto por un momento... por el caos que hiciste aquí... pero no puedo enojarme contigo ahora... te extrañe mucho...
- Y yo a ti. Eres mi hermanito.
Caminan uno delante del otro, y se abrazan fuertemente, por un minuto el olor y el problema está olvidado. ¿A qué vino Joker? Vale, ya lo recordó. Se separan y K mira el nuevo atuendo de su hermano de pies a cabeza.
- Pensé en ir a verte... -Dice Joker para romper el hielo- en cuando supe que estabas vivo pensé en ir a verte. Pero cuando llegué, me dijeron que no estabas.
- Fui a la Granja. Estaba entrenando, necesitaba volver cuanto antes.
- Me mando el jefe. El comandante. El... esta muy enojado, en verdad muy enojado.
- ¿Por qué?
- Por el desastre que hiciste. Mira esto -señala la pila de muertos- ¿Como hiciste esto?
- Les dispare hasta que murieron. Fin. ¿Quieres eso en un reporte escrito?
- No. Quiero que te responsabilices por esto cuando él venga. Llega en un par de minutos.
- Si él venía enseguida, ¿Por que viniste?
- Para verte. Quería verte. Necesitaba ver a mi hermano, necesitaba comprobar que era verdad.
- Pues lo es.
Joker se va, decide que es hora de volver afuera, antes de que él jefe llegue.
K, adentro, sabe que las cosas se pondrán feas cuando él llegue. A diferencia de Joker, al jefe no le gustara nada de lo que vera. No puede ser tan malo, ¿O si? Solo son un monton de cadaveres de un par de mafiosos que quisieron pasarse de listos.
La voz rasposa se escucha a su espalda. Le da escalofríos que oculta.
- Me gusta lo que hiciste aquí. -Dice el jefe.
- Gracias, es toda una obra de arte. -Contesta K.
- ¿Que carajos hiciste? -Pregunta el jefe, masticando el "que" y alargando el "carajo".
- Mi trabajo.
- Tu trabajo, tu trabajo era conseguir información... o se me olvido el momento en que te pedí que asesinaras todo lo que respirara.
- Era necesario. Mi equipo fallo. -K saca el último cigarro y el encendedor.
- ¿Tu equipo? Un grupo de idiotas sacados del culo del mundo con dos días de experiencia y tu estas muy oxidado. Hace una semana que volviste e inmediatamente fuiste al entrenamiento en la Granja. ¿No crees que necesitabas más papeleo o un descanso pequeño?
- Entrenamiento nada más.
- Me temo que no cambiaras nunca. ¿Cuánto va desde aquello? ¿10 años?
- 10 años.
- ¿Sigues...?
- ¿Culpandome? Nah, cosa del pasado. Tengo un poco de informacion. Lester. Su cara no la muestra al parecer, tal vez lo conocemos...
- Posiblemente. Pero esa información no me basta K. Y aunque esos imbéciles hayan muerto eso no justifica tus acciones...
- No se de que te quejas.
- De que los putos muertos no hablan.
- Y creo que vivos tampoco hubieran hablado. Excepto que me dejaras usar mis propios métodos.
- Hace 3 años que prohibimos el uso de tortura para conseguir información.
- Ustedes siempre le quitan lo divertido a esto.
Diversión. K ve la diversión en lo que el sufrimiento ajeno representa. Sufrimiento.
Todos nacimos para amar, todos nacimos para sufrir.
Nacimos para amar. Nacimos para sufrir.
Amar. Sufrir.
A veces el espacio es mayor de lo que creemos entre estas dos palabras, pero están mas cercanas de lo que pensamos.
Camina hacia la puerta, ve el charco de sangre y decide que tal vez hizo algo mal. Las cosas no siempre van bien en este trabajo, porque a veces las cosas son un poco inestables.
Inestabilidad.
Palabras, son solo palabras, maldita sea K, concentrate en lo que necesitas.
- ¿Tienes algún caso relacionado? -Pregunta, y el humo sale por su nariz.
- Pensaste muy lentamente hijo... esperaba eso de ti. -Responde el jefe- Tenemos una pista menor, que bien puede llevarnos a un callejón sin salida, o llevarnos al tal "Nestor".
- Lester.
- Como sea. Pero para esto, necesitaras un equipo nuevo. Totalmente útil y que no muera en dos minutos. Además de que necesitamos a alguien que sea bueno infiltrándose.
- ¿Qué hay de Joker?
- El tiene su propio equipo, pero el sargento Jackson es nuevo. Llevalo con Strangelove y aprovecha a conocer a la chica nueva, dicen que quiere conocerte.
Incertidumbre.
Palabras, mas palabras. "Chica nueva" es una frase muy cliché para K. ya que los "nuevos" tienen el 60% de probabilidades de morir en el trabajo. Y el 60% significa que es casi seguro.
A esto se refiere la incertidumbre. A no saber.
Es una palabra, solo una palabra mas. No le tomes importancia.
Chico nuevo. Chica nueva.
Recluta. Analista.
Diferencias y similitudes. Deja de procesarlo K, necesitamos avanzar en la historia.
¿Por qué no vamos con tu hermano, por ahora?
jueves, 4 de febrero de 2016
lunes, 18 de enero de 2016
El Fin De Los Mundos. Capítulo 6 - La Muerte.
- ¿Por qué no nos rendimos y pedimos un cese al fuego? -Pregunta el soldado de color, cuyo nombre no recuerdo.
- ¿Quieres preguntar? -Cruzó los brazos- Vale, pregunta. -Le hago una seña con el revólver.
Tira una bandera blanca y durante un minuto sale de cubierto.
- Miren, creo que nos rendimos. ¿Vale? Estoy desarmado.
Muchos disparos suenan, su cuerpo cae friamente aporreando contra el suelo, pero Jackson jala su cuerpo a la cobertura de nuevo mientras dispara a la nada. El chico está muy malherido, pero el paramédico se pone manos a la obra mientras Jackson dispara sin apuntar. El miedo y la desesperación inunda su cara. Una lagrima sale de su ojo.
Estas cosas pasan la primera vez.
Esto no justifica el desperdicio de balas.
- Jackson, maldito hijo de puta. Apunta firme. -Doy la orden, el tipo le tiemblan las manos de puta madre, y no le atina a nada- Esas balas podrían salvar tu vida.
- Está bien, señor.
Putos novatos. Nos meten en problemas. Los odio. (Sobre todo cuando son sacados de la jodida Cosecha).
Me atrevo a calcular, pendejamente que llevamos como 5 minutos aquí, atrincherados detrás de un par de cajas. Quedan el soldado Jackson, el sargento Paramédico, y el otro soldado cuyo nombre se me olvida (Y cuyas entrañas están saliendo por su pecho como quejumbroso de su boca).
- Soldado Jackson. -Le llamo- ¿Cuantas misiones lleva activo?
- Es la primera, señor. -Responde, y dispara sin apuntar atrincherado.
- Wow, un novato recién salido de la cosecha. Me gusta. Quiero que tome nota mental -Cargo mi revólver- de lo que pasa cuando alguien no obedece las órdenes.
- Si señor.
Hace 10 minutos (Minutos más, minutos menos, como si importara) estábamos saltando del avión. Apenas aterrizar di orden de no disparar a los vigías de la colina de la bodega. Algún hijo de perra disparó, y empezó a desatarse el infierno sobre nosotros.
No se cuantos soldados venían conmigo hoy, pero estoy seguro de que quedamos cuatro, el paramédico, y dos pequeños pobres diablos.
Nos atrincheramos a como se podía dentro de la bodega. Y tenemos a 13 o 15 hombres disparando a nuestros culos.
Piensa, K. Has salido de cosas peores de esta. ¿Cómo saliste la última vez?
Humo. Las granadas de humo.
- K - Me llama el paramédico- ¿Cómo saldremos de esta?
- Tranquilo, todo está bajo control. -Respondo y saco mi cajetilla de cigarros, para mi desgracia esta jodidamente vacía.
Saco el encendedor de mi bolsillo y una bengala de humo de mi traje. Creo que no quiero gastar mis granadas de humo. Tengo un plan, no muy brillante: la puerta está recto a la izquierda, podría tirar la bengala, esperar a que ahume y mientras ellos corren yo salgo a matar a todo lo que respire.
- Sargento, -Le digo al paramédico- ¿Puedes cargar al tipo, y que Jackson te de cobertura mientras escapan?
No dudaría que me respondiera que sí. El paramédico es alto y bastante estrecho de cuerpo, pasa horas trabajando en el gimnasio.
Asiente con la cabeza. Sonrió. Bengala, encendedor. Chispa, fuego, humo.
Las mejores frases son cortas.
Ellos corren cuando la maldita cosa humea y Jackson dispara sin saber a que. Escucho el sonido seco de un cuerpo cayendo violentamente contra el piso, lo que significa que le debió dar a alguien.
Una vez que salieron, me decido a ponerme en un lado de la cobertura. Me acomodo el casco me pongo bien los pantalones y miro mi reloj. Esto no tomará mucho.
- Caballeros, les tengo una proposición. -Les gritó desde la cobertura- Ustedes se rinden y yo no les asesinó brutalmente.
- Eres tu contra muchos de nosotros. -Dice alguno.
- Bueno, soy el hijo de la muerte, pequeño cabrón.
Escucho silencio, luego una carcajada. Je, me gusta cuando se ponen difíciles.
Activo el sensor infrarrojo de los lentes, con el humo restante de la habitación es un poco complicado de ver en un inicio, pero después es tan sencillo como montar en caballo.
Tres izquierda, tres derecha, tres al frente. Uno atrás, con un arma muy jodidamente grande. Apago el infrarrojo. Tengo que preparar el cuchillo.
Suspira.
Tranquilo.
Saca el cuchillo.
La niña, su voz, su risa. Me espanto un minuto. Ella sigue junto a mi, viéndome fijamente con una cara seria
- ¿Que haces aqui? - Les pregunto.
- Lo de siempre K. Te vigilo. Veo como haces una larga caminata al infierno.
- Y tu una escalera al cielo.
- ¿Eso es un chiste?
- No veo porque debería de serlo, pequeña. No te había visto en 5 años, desde que me olvide de quien era. No hay motivos para que estés aquí. No he hecho nada malo, ni he bebido, ni tampoco he tomado antidepresivos o analgesicos.
- ¿Estás seguro?
- Por supuesto que sí.
- Podrás engañarte a ti mismo, K, pero jamás engañaras a tu conciencia.
- No deberías jugar con mi mente.
- Carajo, claro que si.
- No maldigas, tienes como 10, no deberías maldecir aun.
- Yo no me preocuparia por las maldiciones, sino a los chicos que se aproximan lado y lado.
Ella desaparece, como si nunca hubiese estado aquí. Tenía razón, lado y lado de la cobertura. Si mi revolver no me falla, los 13 tiros serán más que suficientes. Espero a que se acerquen.
La velocidad de mi padre.
El cuchillo en la cabeza de uno y un disparo en el pecho al otro. Se aporrea con la pared y salgo corriendo de la cobertura con el cuchillo, se lo lanzó en los testículos a uno, y cuando se agacha uso su cuerpo para pasar sobre el, disparando. Luego saco mi cuchillo y le disparó en la cabeza cuando está de rodillas.
6 segundos.
Tiempo record.
Oldfield estaría orgulloso de mi.
El jefe, está a cubierto. Tiene una escopeta. Es el ultimo que queda, meto una bala de goma en mi revólver y apuntó a la cobertura. Disparo.
Cae de espaldas contra el piso. Lo miro y se retuerce. Su chaqueta sangre, debí romperle algo.
- Tu sabes cual es mi nombre. -Le digo y apunto con mi revolver- Mis habilidades. Sabes quien soy y lo que mi arma hace...
- No... provoca... herida... no... mortal... -Tartamudea entre dientes.
- Exacto. Ahora, tu sabes bien que necesito.
- Un... nombre..
- ¿Cual es?
- Lester... no... se... su... nombre...
- ¿Haces tratos con desconocidos?
- Nadie... le... conoce...
- Cuanto me he perdido en 5 años... -Descanso la revolver- ¿Tienes tabaco?
- En... chaqueta...
De su chaqueta sacó una cajetilla de cigarrillos. Saco el encendedor... no enciende, solo chispea, maldita porqueria.
- ¿Tienes fuego?
- Uno... de... ellos...
Arrastró los cuerpos, son nueve, y el que aun no muere. Los pongo en una pila gigante de cuerpos, llenos de orina y excremento. Saco el encendedor de uno de ellos. Agarró a este tipo de los brazos y lo pongo sobre los demás cadáveres. Creo que estoy un poco cansado, así que me siento sobre la pila de cadáveres.
Este bastardo chilla, lo que sea que le rompi es justamente sobre lo que estoy sentado. Clavo mi cuchillo en su corazón, y la sangre recorre mi pantalón... y los demás cuerpos.
Ya que estoy suficientemente cómodo, es hora de un buen cigarrillo. Lo meto a mi boca, chispeo. Y carajo, veo claramente el desastre que he causado, diez muertos en una pila de cadaveres hinchados cuyos cuerpos desechan todo aun.
- Vaya desastre tienes, K.
- Calla.
- A él no le va a gustar esto.
- Me importa una mierda lo que a él le importe.
- Vamos K. Dejalo salir.
- !Tu no eres real¡ !No puedo hacerte real! -Grito, desesperado e impotente.
- K... soy tan real como tu. Estuve tan cerca de estar aquí, y a la vez tan lejos de ti. No me digas que no me amas.
La ignoro. !Desaparece¡ !No quiero saber nada de ti¡
Eso es... inhala... exhala...
Humo... tabaco... exhala por la nariz... tranquilo... no te estreses, no es como si ella estuviera ahí. Todo está en tu cabeza.
Tiene razon, a el no le va a gustar esto.
No, claro que no, no le va a gustar.
No le va a gustar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)